Dicen los entendidos que el fútbol se lleva en la sangre. La calidad nace no se hace. Son muchos los futbolistas que han querido seguir los pasos de sus padres, algunos con más suerte que otra. ¿Es algo genético? ¿Existe el gen futbolístico?
Hay niños que nacen ya con la creencia popular de que serán estrellas. Son el caso de los hijos de Zidane, será el caso de los hijos de Messi, Iniesta y Xavi cuando nazcan, y es sin duda el caso del hijo del Kun Agüero, a la postre, nieto de Diego Armando Maradona. Otros, como el hijo de Pelé, se dejan llevar por la fama de su padre hacia sitios menos aconsejables. Esto sin embargo no asegura el éxito. Llevar a la espalda el nombre con el que sus progenitores se hicieron grandes es un gran peso. Así futbolistas como Adrián González (el hijo de Michel, el mítico '8' de la quinta del Buitre), los hermanos Alcántara (hijos de Mazinho), o el mismo hijo mayor de Zidane, Enzo (Zidane) Fernández, lejos de usar el alguna referencia a sus padres, prefieren hacerse un hueco en el firmamento futbolístico por si mismos.
Por otro lado, están los jugadores que han hecho famosos a sus padres en el mundo entero. Jugadores cuyos padres también fueron futbolistas pero conocidos solo a nivel nacional, bien por su poca calidad o bien porque el mundo del fútbol, hasta hace 15 años no es el 'show-business' que es ahora. Así el caso de Diego Forlán (su padre formó parte del plantel del Peñarol uruguayo que derrotó al Madrid 'Ye-Ye' en la Copa Intercontinental de 1966), Gonzalo Higuain (su padre jugó entre otros en Boca y River, así como en Francia), Sergio Busquets (hijo de Carles Busquets, para mi opinión, uno de los peores porteros, junto a Lopetegui y Rüstü del Barcelona en las 2 últimas décadas). Ellos fueron capaces de incluso mejorar los pasos de sus padres, aunque en el caso de Sergio, quizás el nombre de su padre sigue pesándole, pero para mal, y por ello decidió ponerse sólo 'Sergio' en la camiseta.
El último 'hijo de-' en llegar a la élite futbolera es el hijo de 'El Principe' del Real Madrid, Fernando Redondo. Redondo padre ha sido uno de los jugadores más elegantes que haya vestido la camiseta del Real Madrid, solo superado por Zinedine Zidane. Redondo fue un ejemplo dentro y fuera de las canchas. Castigado por las lesiones en sus primeros años en el Real Madrid, se convirtió rápidamente en el dueño y señor del centro del campo blanco, que aún le busca sustituto, siendo el único pivote incluso con Fabio Capello en el banquillo merengue. Será recordado en la memoria de los aficionados por su melena (copiada luego por Guti y que le costó la convocatoria con la Selección Argentina a las ordenes de Passarella), pero sobre todo por su jugada en la banda en los cuartos de final de Champions League ante el Manchester United. Tras su marcha al Milán, de nuevo la rodilla le privó de jugar durante gran parte de la temporada, por lo que renuncio a su sueldo.
Su hijo, Fernando Redondo Jr. jugaba en las categorías inferiores del subcampeón del torneo argentino, Tigre, hasta hace dos días. El lunes, el entrenador del primer equipo, un viejo conocido del fútbol español, 'el vasco' Arruabarrena (ex Villarreal) decidió hacerle hueco en el plantel para hacer la pretemporada. Su puesto es de enganche, con lo cual las comparaciones con su progenitor serán mas díficiles. Sin embargo el 'pibe' ya avisa: "Ningún entrenador me obligará a cortarme el cabello". Quien avisa, no es traidor.
miércoles, 11 de julio de 2012
Hijos de leyendas
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